Miro, yo remiro y vuelvo a mirar
En la oscuridad total yo me hallo
Y además yo me encuentro secuestrado
Solo y extraño, sin fuerzas para volar
¿Por quien? Eso amado padre no importa
Lo que debes hacer, sencillo es
Manda veinte de tus mejores tropas
¿Qué veinte? digo más… yo digo cien
Desata a los perros,… sin compasión
Que los canes les roan y destruyan
A su triste y sombrío corazón
Mientras, yo aquí a ti solo te espero
Espero padre mío, que aquí vengas
Mirando el sol, mirando tu regreso
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